Esta escapada de 3 días la hicimos en el año 2009 por el Parque Natural de las Arribes, que aquí en Salamanca, lo
conforman dos comarcas situadas en el oeste y limítrofes con
Portugal:
Son comarcas de una
gran belleza paisajística pues el río Duero las cruza antes de entrar en
Portugal, descendiendo de una altitud de 630 metros a los 120 metros en la
frontera, encajonándose y formando un cañón con paredes verticales de hasta 500
metros. Este espectacular encajonamiento del Duero, obliga a sus afluentes a
encajarse profundamente en el terreno formando saltos o cachoneras de gran
belleza y profundos cañones. El resultado es una morfología que nadie espera
encontrar en estas tierras y que a nadie defrauda.
La denominación es "Las” Arribes en lugar de “Los” Arribes.
Los lugareños llaman “arribes” a las pendientes, a menudo repentinas y abruptas,
que descienden al río.
Los recursos del Patrimonio Histórico-Monumental son
diversos, variados y de gran interés. Algunos los hemos visitado con la
autocaravana en esta escapada, otros en excursiones anteriores ( que en otro
momento describiré) y otros aún quedaron pendientes:
- Restos arqueológicos: Dólmenes y verracos y Castros como el de Yecla, Las Merchanas y el del Castillo, entre otros. Forman parte de la Ruta de Castros y Verracos, que une Avila con el Norte de Portugal.
- Fortificaciones militares: En Ledesma, San Felices de los Gallegos, Sobradillo…
- Instalaciones hidroeléctricas: Las presas y centrales de Almendra, Villarino, Aldeadávila y Saucelle.
- Navegabilidad fluvial: Paseos turísticos en barco por el Duero, desde la playa del Rostro en Aldeadávila de la Ribera y en Vilvestre. También está el muelle de Vega Terrón, pero éste no he comprobado que funcione.
- Riqueza histórico monumental: Puentes, iglesias, restos de castillos y ermitas en lugares privilegiados como la de Pereña.
Una de las cosas que
me he dado cuenta en esta visita a Las Arribes es que se acaban los
calificativos para describir las imágenes que proyectan estas tierras. La
belleza, la espectacularidad, el asombro y la grandiosidad son de tales
magnitudes que lo mejor es disfrutar contemplándolas.
En todo el recorrido visitaremos dos castros, varios pueblos y haremos rutas sencillas caminando para acercarnos a los miradores o balcones sobre el Duero.
En todo el recorrido visitaremos dos castros, varios pueblos y haremos rutas sencillas caminando para acercarnos a los miradores o balcones sobre el Duero.
Nuestra ruta comienza en el
Castro del Castillo (SALDEANA)
Nada más pasar Vitigudino, a unos 5 Km., cogemos la
carretera de Guadamiro y Barruecopardo. Creo que es mejor ir por Lumbrales puesto
que ésta nos lleva a Saldana por una carretera que parecía un carril bici.
Aparcamos la auto en el inicio del recorrido y completamos el trayecto hasta el castro por un camino lleno de piedras brillantes de mica. El castro te da la bienvenida con las piedras hincadas. Ocupan toda la superficie delantera del mismo, con un radio de unos 100m., y que forman un conglomerado defensivo de primer orden.
Aparcamos la auto en el inicio del recorrido y completamos el trayecto hasta el castro por un camino lleno de piedras brillantes de mica. El castro te da la bienvenida con las piedras hincadas. Ocupan toda la superficie delantera del mismo, con un radio de unos 100m., y que forman un conglomerado defensivo de primer orden.
Está rodeado por agua, como una península. Por el oeste el Arroyo Grande, por el sur y el este el río Huebra. Si a eso le añadimos que estas aguas discurren por unos cajones de piedra cuyos fondos están a más de cien metros de profundidad del castro, tendremos entonces todos los ingredientes necesarios para imaginarnos una visita tan sugerente como la que ofrece la realización del recorrido que existe alrededor del mismo, y cuyo itinerario encontramos en el panel informativo situado en el lugar de las piedras hincadas, con la denominación de “Sendero de los Molinos y los Miradores”.
De vuelta a la auto pasamos por antiguos chozos:
y nos vamos en busca del segundo castro del día, el de
Está
situado en el término de BERMELLAR, aunque
en los mapas y los folletos turísticos
lo encuadran en el de Lumbrales. Camino del castro, en la bifurcación que se
encuentra a la salida del Puente Resbala tomamos la carretera de Lumbrales en
lugar de la de Bermellar, que te lleva directamente.
y nos vamos en busca del segundo castro del día, el de
Las Merchanas
Aprovechando el paso por LUMBRALES nos dirigimos a la oficina de Turismo, situada enfrente
del Ayuntamiento y con un verraco en la puerta,
pero estaba cerrada. De vuelta a la auto pasamos por la plaza mayor
donde está la Torre del Reloj, el edificio más emblemático del municipio, antes
cárcel y ahora museo arqueológico.
Tomamos rumbo al castro de Las Merchanas y a unos 5 Km.
encontramos el desvío, un camino rural que te lleva al aparcamiento y desde el
que se inicia el recorrido musealizado, con instalaciones que nos enseñan cosas de la prehistoria y del medio natural. Muy pronto se llega a un lugar donde hay dos caminos, es aconsejable
tomar el de la derecha que te lleva hasta el Mirador del Castro en el que hay paneles
informativos, ilustraciones y catalejos.
Desde allí se baja al castro, pasando por el Molino del Tío Justo, y se siguen las informaciones de los paneles. Durante el recorrido veremos las murallas, la puerta de entrada, restos de un muro romano y las piedras hincadas; en una superficie aproximada de 10 Ha. El regreso se hace por el camino de la derecha que se corresponde con el que dejamos a la izquierda anteriormente.
Desde allí se baja al castro, pasando por el Molino del Tío Justo, y se siguen las informaciones de los paneles. Durante el recorrido veremos las murallas, la puerta de entrada, restos de un muro romano y las piedras hincadas; en una superficie aproximada de 10 Ha. El regreso se hace por el camino de la derecha que se corresponde con el que dejamos a la izquierda anteriormente.
De ahí regresamos a Lumbrales, con el permiso de las vacas que circulaban por el camino rural y nos dirigimos a SOBRADILLO en el que destaca su símbolo: La torre del homenaje que formó parte del castillo situado en la línea defensiva frente a Portugal. Aparcamos en la plaza mayor donde se encuentra la iglesia con un arco de medio punto en su entrada. Nos llevamos de recuerdo uno de los monumentos más importantes: el queso de Sobradillo.
Después nos vamos a LA FREGENEDA que es el extremo más occidental de Salamanca y la última
estación ferroviaria que había antes de la frontera, cuando funcionaba el tren
que comunicaba Boadilla con Barça d’Alva. Este trayecto de 17 kilómetros, ha
quedado como ruta turística, la Ruta de los Túneles, en un marco precioso y con
una infraestructura ferroviaria de lo más impresionante, con 20 túneles y 13
viaductos metálicos. Es una ruta que dejamos
para otra ocasión con más tiempo y mejor preparación.
Bueno, el día se estaba acabando y había que buscar un lugar para pernoctar, volvimos para atrás y paramos en HINOJOSA DEL DUERO, cabeza del Abadengo, llamado así por ser la jurisdicción del Abadón (Abad de los Templarios). Asentamos el castro en un parque tranquilo y silencioso en el que se encuentra la residencia de sabios del lugar, a la entrada del pueblo.
2ª Parte de las Arribes: Rutas y miradores de Hinojosa, Vilvestre y Mieza
Me ha gustado mucho...esta parte de Salamanca la conozco y me encanta!!
ResponderEliminarGracias. A mí también me gusta mucho.
ResponderEliminarLas Arribes es que tiene un paisaje espectacular con el Duero encajonado.
A mí también me ha gustado, ya iré leyendo otros artículo, poco a poco. jejejeee, me falta tiempo
ResponderEliminar¡Si es que nos falta tiempo para escribir, leer, publicar, comentar,corregir, contestar...!jeje
EliminarVisitar sus pueblos y descubrir y recorrer sus castros, algunos tramos de la antigua ruta ferroviaria de La Fregeneda y el Parque Natural de las Arribes del Duero es una magnifica experiencia, sobre todo en primavera y otoño.
ResponderEliminarLos tramos de la ruta ferroviaria que coinciden con los puentes me han dicho que es espectacular pero de mucho riesgo y no sé si han cerrado el paso.
EliminarLo que creo que van a cerrar es el tren que va a Oporto. Tenemos que intentar antes, hacer el trayecto hasta Pocinho.
Saludos.
Pase por esos lugares sin parar a mirar, prometo llevar a mi hijo YA, que bien explicado y bonitas fotos. Un fuerte abrazo
ResponderEliminarGracias Guillermo. En este caso hay que darse una segunda oportunidad y si es con hijo, mejor. Hay unas rutas muy bonitas y un ambiente muy rutal. Se ven muchas clases de animales, dificil de ver para los niños de capital.
EliminarUn abrazo
No los conozco pero con éstas imágenes me ha apetecido un montón apuntármelo a los viajes pendientes. Me encanta el entorno del merendero. Muchas gracias. Un saludo viajero:))
ResponderEliminarGracias a tí por pasarte por aquí. Si vienes no te arrepentirás. Solo el paisaje es ya una maravilla. Un abrazo.
EliminarA través de ti estoy conociendo tantos lugares de España que me encanta. Así que me dejo llevar por tus entradas y me asomo a rincones que no conocía. Así que gracias, me gusta realmente salir a pasear contigo en autocaravana o sin ella.
ResponderEliminarPues no te imaginas lo que me gusta a mí conocer otras civilizaciones de tu mano, el enfoque que le das y el sentimiento que le pones. De las fotografías ya ni hablamos. Yo si que estoy agradecida de poder hacer contigo rutas que sé que nunca haré de otra forma. Un abrazote!
EliminarGracias Pilar, viniendo de ti, gracias. Por cierto, por no gustarte redactar en la escuela.... serías de 10 ahora! Qué bueno tanto pasear!
Eliminar